No sufras más con el dolor de muelas: descubre cómo aliviar las molestias y cuidar tu salud bucal
¿Acaso has sentido ya ese dolor palpitante de muelas que parece interminable? Nada peor que intentar concentrarte en el trabajo, estudios o incluso relajarte después de un día agitado, mientras sientes esa punzada en la boca. Esta experiencia puede ser realmente molesta y hasta debilitante, pero no necesariamente una condena al sufrimiento.
Por suerte, hay maneras de aliviar estas molestias y proteger tu salud bucal. En este contenido, te enterarás de las causas que provocan el dolor de muelas y cómo solucionar este problema de una vez por todas.
¿Qué provoca el dolor de muelas?
La respuesta a la causa de este dolor de muelas no siempre es simple. A veces, puede ser una caries oculta que decidió manifestarse o una gingivitis que ha estado ignorándose.
O, quién sabe, una sensibilidad dental originada por malos hábitos alimenticios. Sea cual sea el motivo, esa molestia asegura que algo no anda bien con tu salud dental.
Así que, si tienes problemas con esta condición, sigue leyendo para encontrar más detalles sobre cada causa y, desde luego, cómo aliviar estas molestias.
Caries dental
La caries se produce cuando los ácidos generados por las bacterias en la boca erosionan el esmalte —la capa exterior protectora de los dientes— creando cavidades que, si no se tratan, pueden causar gran dolor y molestia.
Infección pulpar (pulpitis)
Cuando la pulpa dental —que tiene nervios y vasos sanguíneos— se daña por una caries profunda o lesión, puede inflamarse. Esto puede provocar un dolor intenso continuo, que empeora especialmente con estímulos como comidas o bebidas calientes y frías.
Absceso dental
Este tipo de dolor es definitivamente algo que no querrás ignorar. Cuando hay un exceso de pus debido a una infección bacteriana, la presión en el diente aumenta, conduciendo a un malestar palpitante que puede ser difícil de soportar. Si no se trata, podría convertirse en un problema de salud más serio.
Fractura en el diente
Cuando un diente se raja o rompe, la pulpa puede quedar expuesta, llevando a un dolor intenso y sensibilidad. Muchas veces, este tipo de lesión no es visible a simple vista y puede ocurrir de varias maneras:
- grietas: pequeñas fisuras en la superficie del diente;
- fracturas: cuando partes del diente se desprenden;
- fracturas radiculares: la lesión ocurre en la raíz y puede no ser visible.
Tratamiento de conducto
Ocurre cuando la pulpa dental, la parte interna del diente que contiene nervios y vasos sanguíneos, se inflama o se infecta. Esta inflamación generalmente sucede por caries profundas, traumas o restauraciones repetidas que debilitan la estructura del diente.
Ignorar la necesidad de un tratamiento de conducto puede derivar en complicaciones más serias, incluyendo la pérdida del diente afectado.
Bruxismo
es un trastorno que ocurre cuando rechinas o aprietas los dientes, a menudo sin darte cuenta, especialmente durante la noche al dormir. Este comportamiento inconsciente puede llevar a una serie de problemas dentales, incluidas molestias palpitantes en los dientes.
La presión constante y los movimientos repetitivos pueden desgastar el esmalte dental, causar fracturas e incluso dañar la estructura dental, resultando en un gran malestar.
El dolor palpitante asociado al bruxismo puede intensificarse con el tiempo, especialmente si el problema no es tratado.
Cómo aliviar el malestar de un dolor de muelas
Una de las dudas más comunes sobre el dolor de muelas es qué hacer cuando sucede. Lo más indicado es agendar una visita al dentista cuanto antes. Sin embargo, mientras llega el día de la consulta, hay maneras de aliviar este malestar.
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Aplica compresas frías para calmar el dolor
Las compresas frías son una excelente opción para reducir el dolor y la inflamación, ya que ayudan a disminuir el flujo de sangre en el área afectada. Puedes usar una bolsa térmica o hielo, pero es importante proteger la piel para evitar irritaciones.
- coloca algunos cubos de hielo en un paño limpio;
- coloca la compresa en la mejilla, cerca del diente que duele;
- mantenla por unos 15 a 20 minutos;
- haz una pausa de al menos 10 minutos entre las aplicaciones para evitar daños en la piel o quemaduras por frío.
Haz gárgaras con agua salada para ayudar a reducir la inflamación
El agua salada actúa en dos frentes: primero, disminuye la proliferación de las bacterias que pueden causar inflamación. Segundo, reduce la hinchazón al retirar líquidos de los tejidos inflamados a través de la ósmosis, aliviando el dolor y el malestar.
Para realizar la gárgara, agrega una cucharadita de sal a un vaso de agua tibia. Remueve bien hasta que se disuelva por completo.
Puedes realizarlo de 2 a 3 veces al día. Pero atención: el uso excesivo puede irritar la mucosa de la boca y empeorar la situación.
Usa enjuagues bucales para refrescar y proteger
Además de ayudar a eliminar bacterias, los enjuagues bucales también le brindan un aliento más fresco y mantienen la boca protegida.
